ESPN - BEISBOL - Expansi�n en MLB: �C�mo podr�a funcionar una liga de 32 equipos?

ESPN : BEISBOL
http://www.espn.com.co/beisbol/nota/_/id/15567067/mlb-2025-expansion-como-funcionaria-una-liga-de-32-equipos

mi�rcoles, 20 de agosto de 2025
Expansi�n en MLB: �C�mo podr�a funcionar una liga de 32 equipos?

Bradford Doolittle, ESPN

¿Yankees y Mets en el Este de la LA?, ¿Divisiones de ocho equipos?, ¿C�mo se ver�a la MLB con 32 equipos?

Nota del editor: Esta historia se public� originalmente el 28 de febrero de 2024. Se ha actualizado para reflejar los comentarios del comisionado de las Grandes Ligas de Beisbol, Rob Manfred, sobre c�mo la expansi�n podr�a afectar la alineaci�n divisional en la transmisi�n de 'Sunday Night Baseball' de ESPN.

Cuando se habla de la expansi�n de la MLB, el primer tema siempre es qu� ciudades recibir�n nuevos equipos. Pero hay otro factor que impactar� a todo el deporte: c�mo realinear� la MLB sus divisiones y estructurar� sus playoffs para dar cabida a esas nuevas franquicias.

La idea de c�mo se ver�an los equipos en un panorama renovado volvi� a cobrar protagonismo cuando el comisionado Rob Manfred abord� el tema en 'Sunday Night Baseball' de ESPN el 17 de agosto de 2025.

"Creo que si nos expandimos, tendremos la oportunidad de realinearnos geogr�ficamente", dijo Manfred. Creo que podr�amos ahorrarle mucho desgaste a nuestros jugadores en cuanto a viajes. Creo que nuestro formato de postemporada ser�a a�n m�s atractivo para entidades como ESPN, ya que jugar�amos contra equipos del Este y del Oeste, y ese horario de las 10, donde a veces nos toca Boston vs. Anaheim, ser�an dos equipos de la Costa Oeste. Ese horario de las 10, que es un problema para nosotros, a veces se convierte en una verdadera oportunidad para nuestra audiencia de la Costa Oeste.

¿Qu� importancia podr�a tener un cambio en la alineaci�n de la divisi�n? Basta con mirar una de las historias m�s importantes de las �ltimas temporadas: el surgimiento de los Arizona Diamondbacks en 2023. En un contexto diferente, uno que exist�a s�lo un par de a�os antes, pocos lo habr�an notado.

Los Diamondbacks, con 84 victorias, se colaron en los playoffs durante la �ltima semana de la temporada, consiguiendo el sexto puesto de la Liga Nacional, y aprovecharon esa oportunidad para conseguir un puesto en la Serie Mundial. Eran un equipo emocionante y emergente que se convirti� en una de las grandes historias de Cenicienta del beisbol.

Ahora consideren c�mo el formato actual del beisbol impuls� la racha de Arizona:

Calendario: Uno de los equipos a los que los Diamondbacks evitaron ganar ese �ltimo puesto fue su rival de divisi�n, los San Diego Padres, contra quienes jugaron por �ltima vez el 19 de agosto. Los Padres terminaron dos juegos detr�s de Arizona en el standing. En 2022, bajo el calendario anterior, los equipos se enfrentaron siete veces despu�s de esa fecha.

Alineaci�n divisional: Arizona termin� segundo en la Divisi�n Oeste de la Liga Nacional y sexto en la Liga Nacional en general. Si los D-backs hubieran estado en la Divisi�n Oeste de la Liga Americana, habr�an terminado cuartos en su divisi�n y octavos en el standing de la liga, fuera de la contienda.

Estructura de los playoffs: Los Diamondbacks se convirtieron en el segundo sexto clasificado consecutivo en ganar un bander�n de la Liga Nacional. Antes de 2022, no exist�a el sexto clasificado en el beisbol, salvo por los playoffs ad hoc despu�s de la temporada 2020 acortada por la pandemia.

Nada de esto pretende menospreciar la memorable postemporada de Arizona. Sin embargo, la realidad es que las decisiones que toma el beisbol sobre su formato est�n intr�nsecamente ligadas a c�mo vivimos y recordamos cada campa�a.

�ltimamente, hemos estado hablando de la expansi�n futura, y en cuanto al formato, algo que sabemos con certeza es que cambiar�. La expansi�n siempre viene acompa�ada de alg�n tipo de transformaci�n estructural, ya sea la duraci�n de la temporada (1961, 1962), la estructura divisional y/o las asignaciones (1969, 1998), o la f�rmula del calendario (todas las expansiones, aunque s�lo fuera para acomodar a los nuevos equipos).

Entonces, cuando el beisbol se convierta en 32 equipos, ¿c�mo cambiar� el formato para adaptarse al crecimiento? ¿C�mo influir�n los elementos estructurales clave (calendario, asignaciones de liga/divisi�n, formato de playoffs) en las narrativas futuras del beisbol?

No tenemos un cronograma exacto para la expansi�n, y aunque hemos intentado reducir la lista de ciudades candidatas a un grupo bastante peque�o, desconocemos qu� ciudades recibir�n equipos. Tampoco sabemos d�nde jugar�n las 30 franquicias existentes cuando se produzca la expansi�n.

Con tantos factores en juego, es imposible predecir el futuro del formato del beisbol. Sin embargo, tras analizar el tema y consultar con expertos de la industria, podemos se�alar algunos de los factores que entrar�n en juego, c�mo podr�amos evaluarlos desde la perspectiva de las pr�ximas temporadas hasta que la expansi�n se haga realidad y analizar una posible manera de que todo se concrete.

Alineaci�n

¿Cuatro divisiones? ¿Ocho? ¿Qu� hay de dos? ¿Se mantendr�n pr�cticamente intactas las afiliaciones tradicionales de las ligas, o se har� realidad la tan rumorada realineaci�n radical? Es demasiado pronto para saberlo, pero este tema promete ser el m�s controvertido entre los aficionados al beisbol, tanto tradicionalistas como defensores de la renovaci�n.

La variable obvia que falta al especular sobre esto es que desconocemos d�nde estar�n los equipos de expansi�n. Si el beisbol opta por una reorganizaci�n importante, la geograf�a ser� el factor principal. Una reorganizaci�n basada en la geograf�a parece un concepto simple, hasta que se empiezan a considerar los detalles.

Hay ocho franquicias que operan en las zonas horarias del Pac�fico y de la Monta�a. Esta cifra encaja perfectamente en una estructura de 32 equipos, ya sea con cuatro divisiones de ocho equipos u ocho divisiones de cuatro equipos.

La situaci�n se complica si uno de los equipos de expansi�n termina en el Oeste, como podr�a suceder con San Jos�, California; Salt Lake City; Portland, Oreg�n; e incluso Vancouver, Columbia Brit�nica, que se han barajado como posibilidades. Si una novena franquicia se ubica en el Oeste, alguna organizaci�n terminar� con una asignaci�n divisional inc�moda. Dadas las grandes distancias en el Oeste, esto genera excesivos problemas de viajes, entre otras cosas. Esto ya es un problema, pero es algo que la expansi�n podr�a solucionar.

Por supuesto, es poco probable que la simetr�a y las preocupaciones por los viajes determinen qu� ciudad recibir� un equipo. Si una ciudad tiene la mejor oferta, probablemente recibir� un equipo. Tambi�n es posible que, con el traslado de Oakland a Las Vegas, la MLB decida que tiene la distribuci�n adecuada de mercados en esa parte del pa�s.

En otros lugares, actualmente hay ocho equipos en la zona horaria del centro. Esos ocho —Chicago Cubs, Chicago White Sox, Minnesota Twins, Milwaukee Brewers, Kansas City Royals, St. Louis Cardinals, Houston Astros y Texas Rangers— conformar�an un buen circuito. Sin embargo, una configuraci�n de ocho divisiones obligar�a a una divisi�n norte-sur entre esos equipos, lo que significa que alguien ver� disminuida una rivalidad clave actual o potencial. Entre los candidatos a la expansi�n en esta zona horaria se encuentran Nashville, Tennessee; San Antonio/Austin, Texas; Nueva Orleans; y Ciudad de M�xico, aunque esta �ltima est� tan al sur que la zona horaria pr�cticamente no importa.

En la zona horaria del Este, hay 14 equipos actualmente. Varias de las ciudades candidatas m�s discutidas tambi�n se encuentran en esa zona horaria, como Charlotte/Raleigh, Carolina del Norte; Montreal; y Orlando, Florida, entre ellas. Si dos de esos mercados ganaran las ofertas de expansi�n, todo el proyecto de realineaci�n geogr�fica se simplificar�a, siempre que no haya reubicaciones entre las dem�s franquicias. Una pregunta clave: ¿C�mo identificamos, mantenemos y creamos el mayor n�mero de rivalidades genuinas?

La importancia de las rivalidades, ya sean geogr�ficas o tradicionales, ser� uno de los elementos clave de la estructura del beisbol que habr� que observar en las pr�ximas temporadas. La importancia de algunas rivalidades es obvia y de larga data. Otras cobran protagonismo, mientras que otras m�s se desvanecen. La tarea del beisbol ser� comprender hasta qu� punto las rivalidades ayudan a vender el juego como producto presencial y televisivo.

¿Qu� define una gran rivalidad? Un estudio cita la proximidad, los niveles recientes de competitividad y la frecuencia de la competencia, entre otros factores. Pero los grandes momentos memorables y las personalidades de los superestrellas tambi�n influyen. El beisbol s�lo puede planificar un n�mero limitado de estos factores.

Aun as�, si se analizan las principales rivalidades con esa metodolog�a, las tres principales habr�an sido f�ciles de predecir: New York Yankees vs. Boston Red Sox, San Francisco Giants vs. Los �ngeles Dodgers y Chicago Cubs vs St. Louis Cardinals. �stas han sido rivalidades feroces durante siglos, y cualquier realineamiento pragm�tico las considerar�a sacrosantas.

M�s ilustrativa en la lista es la rivalidad Texas Rangers vs. Houston Astros, una que gradualmente se ha convertido en una de las mejores del beisbol. Alcanz� su punto �lgido en 2023, cuando ambos equipos eran de �lite y se enfrentaron en la Serie de Campeonato de la Liga Americana. Eso nos prepar� para una dram�tica repetici�n en 2024, y as� sucesivamente. As� es como suceden estas cosas, lentamente, pero de repente. La rivalidad fue bastante tibia durante los a�os de los juegos interligas, pero se intensific� una vez que los Astros se unieron a la Divisi�n Oeste de la Liga Americana en 2013.

Esto nos dice algo. La proximidad importa, sin duda. Pero igual de crucial es que los equipos compiten por lo mismo. Por muy buena que sea la rivalidad entre los Cubs y los White Sox en Chicago, ¿imaginan c�mo ser�a si se enfrentaran en la recta final con un t�tulo divisional en juego? Dicho esto, se han creado buenas rivalidades entre equipos que no pertenecen a la misma divisi�n.

Otro factor a considerar en el tema de las divisiones de cuatro u ocho equipos es el tama�o del mercado. En teor�a, si se opta por una configuraci�n de ocho divisiones, se pueden agrupar los equipos hasta cierto punto seg�n el tama�o del mercado. Algunos clubes de mercados m�s peque�os podr�an inclinarse a impulsar esta din�mica. Vale la pena mencionarlo como un factor que surge cuando se discuten estos escenarios entre quienes cubren el deporte, pero probablemente no sea un problema para quienes toman las decisiones en el beisbol.

En primer lugar, la MLBPA no estar� muy contenta si un problema que ya podr�a estar presente (v�anse las divisiones Centrales) se agrava por este tipo de reorganizaci�n econ�mica. Para ellos, el objetivo siempre ser� una estructura que incentive a los equipos a fortalecer sus rosters al m�ximo. Eso ser�, al menos, algo insuficiente en un sistema de ocho divisiones donde los mercados peque�os est�n agrupados y la barrera para ingresar a los playoffs podr�a caer cerca de la marca de .500 o, en algunos a�os, por debajo de ella.

Antes de aceptar la inevitable reestructuraci�n radical, necesitamos muchas respuestas. ¿Qu� tan importantes son las rivalidades para la imagen del beisbol? ¿Cu�les son las verdaderas ventajas de un calendario y viajes con una reestructuraci�n geogr�fica? ¿Hasta qu� punto est� dispuesta la MLB a distanciarse de los tradicionalistas cuando se trata de afiliaciones a ligas de larga data? ¿C�mo se relaciona el tama�o relativo del mercado con el tema de la reestructuraci�n?

Estos son los debates que tendremos durante los a�os previos a la pr�xima expansi�n, y hay muchos. Abr�chense los cinturones.

Calendario

Todos los elementos del formato est�n interrelacionados, y la f�rmula final de programaci�n depender� en gran medida de c�mo se respondan las preguntas sobre la reestructuraci�n de la liga. Sin embargo, una vez que eso suceda, �ste probablemente ser� el elemento m�s f�cil de abordar.

Cuando el beisbol adopt� un calendario m�s equilibrado en 2023, uno que incluye muchos m�s juegos interligas, la liga se configur� como un verdadero experimento de programaci�n. Con menos juegos divisionales, incluyendo aquellos que involucran nuestras sagradas rivalidades, algo se perdi�. Pero tambi�n se gan� algo: Todos los equipos juegan contra todos y, durante cada periodo de dos a�os, cada aficionado tiene la oportunidad de ver a los 30 clubes.

A partir de 2023 y durante los pr�ximos a�os hasta que se produzca la expansi�n, podremos empezar a analizar estas compensaciones. ¿Cu�l es el efecto en la asistencia y los ratings televisivos? ¿Cu�l es el efecto en la competencia? A medida que la evidencia se acumule, podremos tomar mejores decisiones cuando las cosas tengan que cambiar de nuevo.

Con 32 equipos, la flexibilidad de programaci�n tiene ventajas obvias. Por un lado, ya no ser� obligatorio que cada d�a tenga al menos un partido interligas.

Si se produce una reestructuraci�n radical, nuestro concepto mismo de lo que es un partido interligas tambi�n cambiar�. No tendremos partidos de rivalidad adicionales como Cubs vs. White Sox o Yankees vs. Mets porque se convertir�n en partidos divisionales.

La pregunta, entonces, no se centra en cu�ntos juegos interligas deber�an disputarse, sino en cu�ntos encuentros deben celebrarse entre clubes que compiten por los mismos beneficios de los playoffs. Siempre se busca maximizar la competencia y la integridad de la temporada regular.

La duraci�n de la temporada ser� otro tema muy debatido, especialmente si la MLB busca ampliar la lista de playoffs. Por lo tanto, este pilar del formato est� muy ligado al otro, porque la MLB no va a recortar partidos s�lo por recortar partidos. Y los jugadores no van a favorecer una temporada m�s corta sin garant�as de que no afecte sus salarios. Una alternativa frecuentemente citada al calendario actual de 162 juegos es 154, que es una cifra tradicional que preserva la integridad de los registros hist�ricos y, a la vez, da un respiro durante el largo verano. Tambi�n podr�a revertir el incesante descenso de la postemporada en el calendario antes de que coincida con el D�a de Acci�n de Gracias. Una programaci�n de 156 juegos con una configuraci�n de 32 equipos ofrece un buen equilibrio en un formato de ocho divisiones. Se disputar�an tres juegos contra cada equipo de la otra liga (48 juegos), 12 contra los rivales de divisi�n (36 juegos) y seis contra los dem�s rivales de la misma divisi�n (72 juegos). Asimismo, existen opciones interesantes con un formato de cuatro divisiones que permiten alcanzar cualquier duraci�n de temporada, ya sea de 154, 156, 160 o 162 juegos.

A medida que observamos el desarrollo de las temporadas con la nueva f�rmula de calendario, deber�amos poder evaluar emp�ricamente c�mo se est�n desarrollando estas diferentes din�micas en comparaci�n con la f�rmula de calendario anterior a 2023.

Formato de playoffs

Cuando el comisionado Rob Manfred dijo que es demasiado pronto para juzgar el nuevo formato de playoffs, ten�a raz�n. Unas pocas temporadas no nos dicen nada. S�, los equipos con seis clasificados representantes de la Liga Nacional en la Serie Mundial de 2022 y 2023. Por lo que sabemos, si se mantuviera el status quo, algo as� podr�a no volver a ocurrir en los pr�ximos 20 a�os. La muestra —dos a�os— es demasiado peque�a para evaluarla con precisi�n.

Dicho esto, una vez que comencemos a avanzar hacia el proceso de expansi�n y estas especulaciones adquieran mayor urgencia, analizaremos con lupa esos dos a�os y los venideros. Si los equipos con 100 victorias siguen cayendo en la ronda divisional a�o tras a�o, habr� quejas sobre la configuraci�n de los playoffs, la inviolabilidad del primer lugar y la importancia de la temporada regular.

Por lo tanto, es dif�cil predecir cu�l ser� el formato correcto cuando pasemos a 32 equipos. Algunos propondr�n escenarios de 16 clubes, otros pedir�n volver a ocho, donde s�lo participar�n ocho equipos que ocupen el primer lugar. Algunos querr�n quedarse con 12, mientras que otros aceptar�n un ascenso a 14. Una certeza absoluta: el n�mero de participantes no se reducir�. Eso no ocurre en los deportes estadounidenses. Esa puerta s�lo se abre en una direcci�n, para bien o para mal.

�ste es el punto clave al considerar esta �rea durante los pr�ximos a�os: Cualquiera de estos formatos puede funcionar si la integridad de la estructura de clasificaci�n es s�lida. Si un primer puesto representa una ventaja significativa sobre un segundo, genial. Si ganar tu divisi�n te da una ventaja significativa en la postemporada, eso es lo que buscas.

Durante la �ltima ronda de negociaciones del convenio colectivo, la MLBPA plante� la idea de la victoria fantasma, donde el primer lugar recibe una victoria para comenzar una serie. Matem�ticamente, la estrategia tiene m�rito, lo suficiente como para crear la jerarqu�a adecuada de incentivos, junto con mecanismos como pases y juegos extra en casa, para que la estructura de clasificaci�n de cualquier formato realmente tenga sentido.

Pero esto, como se mencion�, est� ligado a la alineaci�n divisional. Si tienes ocho divisiones de cuatro equipos, ser� dif�cil crear distinciones significativas entre los cuatro primeros puestos de cada liga. Y terminar�s con muchos enfrentamientos de playoffs en los que el segundo puesto es, en realidad, el mejor equipo.

La MLBPA seguir� de cerca este asunto. Porque si no hay una recompensa clara y significativa en el formato de postemporada para convertir a tu equipo en el mejor del circuito, el incentivo para invertir mucho en tu roster se reducir�.

En resumen: Estaremos atentos a los resultados de la postemporada durante los pr�ximos a�os, y despu�s, cuando lleguemos a 32 equipos, exigiremos una configuraci�n de playoffs que mejore, y no destruya, la gloriosa y ardua temporada regular de seis meses.

Como dijo el comisionado, s�lo llevamos dos a�os con este formato. Es demasiado pronto para saber si no est� funcionando.

Un posible vistazo parcial

Hemos expuesto muchos factores anteriormente, as� que terminemos intentando integrarlos en un posible resultado, uno que logre un equilibrio entre lo ideal y lo probable.

Alineaci�n

Una vez que se analizan los problemas, simplemente hay menos complicaciones con una estructura de cuatro divisiones que con una de ocho. A�n se puede optimizar geogr�ficamente y hacerlo de forma que se preserven y creen rivalidades significativas. Y con cuatro divisiones, con una verdadera recompensa por terminar primero, los equipos siempre tendr�n un incentivo para construir sus rosters y competir por ese premio.

En cuanto a c�mo se construyen esas divisiones, supongamos que la MLB decide que los nombres tradicionales de las ligas se conservan como marcas, pero m�s all� de eso, todo est� en juego. El equilibrio no ser� entre tradici�n y geograf�a, sino entre geograf�a y potenciar la rivalidad. Esto ser� un trago amargo para muchos aficionados, pero los beneficios son demasiado poderosos como para ignorarlos. Conc�ntrese en el �xito que han tenido los Brewers y los Astros desde que cambiaron de liga. No, eso no es lo mismo que, por ejemplo, poner a los Cincinnati Reds en la Liga Americana (que es lo que vamos a hacer), pero Houston y Milwaukee estaban afianzados en sus antiguas ligas. Cambiaron, el mundo no se acab� y han prosperado en sus nuevos circuitos.

Para nuestras ciudades de expansi�n, hemos decidido mantenernos en el Este|Sur y optar por Nashville y Montreal. Utilizaremos los porcentajes de victorias y derrotas de los �ltimos tres a�os, considerando las temporadas inaugurales de los nuevos clubes y ajustando las estad�sticas al nuevo (alerta de spoiler) calendario de 154 juegos.

Necesitamos un standing simulado que ilustre el formato de playoffs que proponemos:

Los asteriscos representan las franquicias que estuvieron vigentes durante la mayor estabilidad del beisbol, de 1903 a 1960, y que permanecer�an en la misma liga. As� que no todo est� perdido: las rivalidades Yankees vs. Red Sox, Giants vs. Dodgers y Cubs vs. Cardinals se mantienen intactas con sus afiliaciones originales, al igual que Guardians vs. Tigers. Las nuevas rivalidades (Dodgers vs. Padres, Astros vs. Rangers, etc.) se mantienen, aunque algunas podr�an pertenecer a una liga diferente.

La mayor�a de los enfrentamientos que actualmente experimentamos como rivalidades clave entre ligas se convierten en duelos intradivisionales, lo que aumenta la tensi�n. Cubs vs. White Sox, Dodgers vs. Angels, Twins vs. Brewers, Royals vs. Cardinals, Rays vs. Marlins, Orioles vs. Nationals y, por supuesto, Yankees vs. Mets se encuentran entre esas rivalidades.

Hemos roto algunos huevos. Los Reds, ahora un equipo de la Liga Americana, han estado en la Liga Nacional desde la administraci�n de Benjamin Harrison. Los Pittsburgh Pirates se remontan a�n m�s atr�s. Como ni Cincinnati ni Pittsburgh han sido ciudades de dos equipos, nunca han presentado un equipo de la Liga Americana. Los Philadelphia Phillies han estado en la Liga Nacional desde 1883, pero, al menos, la ciudad alberg� a un equipo de la Liga Americana (esos Athletics vagabundos) durante m�s de medio siglo. Visto desde otra perspectiva, ser�a definitivamente extra�o pensar en los White Sox como un equipo de la Liga Nacional. No hay una forma perfecta de hacerlo.

Una nota para apaciguar a los tradicionalistas: con cuatro divisiones de ocho equipos, los t�rminos "primera divisi�n" y "segunda divisi�n" volver�an a adquirir un significado literal.

Calendario

Supongamos 154 juegos y que la MLB quiere mantener la din�mica actual de que cada equipo juegue contra todos los dem�s cada temporada. En ese caso, el calendario incluir�a:

• Diez juegos contra cada uno de los siete rivales de tu divisi�n (70 juegos)

• Seis juegos contra los equipos de la otra divisi�n de tu liga (48 juegos)

• Al menos dos juegos contra cada equipo de la otra liga, con un juego adicional contra cuatro de ellos, todos sujetos a alg�n tipo de rotaci�n de sede de temporada en temporada (36 juegos)

El resultado es una duraci�n de 154 juegos, de los cuales, 118 son contra los equipos con los que compites por un puesto en los playoffs. Algunos podr�an preferir menos encuentros interligas, pero �se es uno de los muchos detalles por definir.

Formato de los playoffs

Podemos suponer que la MLB quiere una gran cantidad de juegos de playoffs. Tambi�n podemos suponer que la MLBPA no quiere excederse. El formato actual cuenta con 12 equipos, as� que supongamos que la cifra de compromiso es de 14.

�sa es una cifra bastante buena. De inicio, significa que el primer clasificado obtiene un boleto, lo que crea un gran incentivo para convertirse en el mejor equipo de la liga. Si a eso le sumamos una victoria fantasma en la primera serie de ese equipo, estamos avanzando.

Como el otro campe�n de divisi�n no obtiene un boleto con esta configuraci�n (lo cual no es ideal), debemos asegurarnos de que reciba una recompensa generosa, lo cual no es el caso actual de los campeones de divisi�n que terminan con los tres clasificados y sin pase. Quiz�s un juego adicional en casa y una victoria fantasma ser�an suficientes. Ser�a mejor mantener una estructura de 12 equipos en la que cuatro campeones de divisi�n obtienen un pase y una victoria fantasma.

Por ahora, creemos que lo ideal no se cumplir�. Adem�s, no estamos reclasificando ni permitiendo que los equipos que obtuvieron pases elijan a su oponente, aunque estos temas claramente formar�an parte de la discusi�n. Adem�s, desempatamos algunos juegos bas�ndonos en resultados imaginarios de enfrentamientos directos. Sin embargo, si reducimos la duraci�n de la temporada, quiz� podr�amos volver a organizar juegos de eliminaci�n directa para desempatar en el orden jer�rquico de la clasificaci�n. Los desempates a un s�lo juego son divertidos. Tambi�n podr�amos alargar las series de las primeras rondas, quiz�s al mejor de siete en todos los casos.

Nuestro bracket ficticio de playoffs:

En esta situaci�n nos encontramos hoy al reflexionar sobre la expansi�n que, por incierta que sea, parece vislumbrarse en el horizonte. Mucho de lo que sabemos hoy cambiar� ma�ana, y en cada uno de los ma�anas de los pr�ximos a�os. Hay innumerables permutaciones en este panorama que podr�an ocurrir.

A medida que transcurran las temporadas, podemos analizar estos factores y especulaciones, debatirlos e intentar orientarlos en la direcci�n correcta. Lo m�s probable es que la transici�n no sea agradable, y nadie puede apegarse demasiado a una sola noci�n de formato, ya sea el status quo o una configuraci�n modificada de la que conocemos.

Al menos, quiz�s podamos estar de acuerdo en esto: Cuando se produzca el cambio, queremos que el beisbol adopte un formato que muestre las historias sobre el deporte que todos amamos de la mejor manera posible. Esas narrativas tienen mucho que ver con la estructura que el beisbol establece.

Liga Americana

No. 1 Braves (bye) contra ganador del juego:

No. 4 Blue Jays vs. No. 5 Phillies

No. 2 Yankees vs. No. 7 Red Sox, contra ganador del juego:

No. 3 Rays vs. No. 6 Mets

Liga Nacional

No. 1 Dodgers (bye) contra ganador del juego:

No. 4 Mariners vs. No. 5 Giants

No. 2 Astros vs. No. 7 Padres, contra ganador del juego:

No. 3 Brewers vs. No. 6 Cardinals